lunes, 13 de agosto de 2007

Paris Je taime, burn in flames. De una aventura parisina con indigestion.

Podía quedarme en el aeropuerto y pasar 5 horas sentado leyendo un libro, pero no, decidí ir al centro de paris y alucinar una vez mas ante su belleza indiscutible. Compré un pasaje ida y vuelta del tren hacia el bulevar St. Michelle (17 euros), donde me deleitaría caminando cerca del sena, vería a Notre Dame (imaginando al jorobado tocando la campana) y pasearía por una ciudad que te enamora de solo olerla (malditos franceses que no se bañan). Justo pensando esto, y antes de subir al metro se causo en mi estomago una especie de dolor extremo, igualable solo al calculo renal, que me obligo a salir corriendo al baño mas cercano a descargar las tres comidas que habia hecho durante mi vuelo de 9 horas a paris. Aunque fue una de las peores evacuaciones de mi vida, el alivio fue inmediato.
Salí del baño como un hombre nuevo y me dirigí a mi destino. Un viaje de 40 minutos hasta la estacion de St. Michelle, me bajo esperando ver la ciudad que anhelaba y cuando empiezo a subir las escaleras para pisar la calle, me doy cuenta que el palo de agua que estaba cayendo era el final de mi felicidad en paris. Solo vestía un blue jean y una franela. Salí a la calle y me refugié en una estacion de autobus a decidir mi destino. Habia varias opciones de suicidio pero preferí correr hasta un starbucks coffe que se divisaba entre la avenida St. Michelle. Entro empapado al starbucks y decido pedir uno de los cafes mas impresionantes hechos por el hombre: Caffe Mocha Blanc (3,50 euros). En criollo: Un Cafe con chocolate blanco y crema. Me siento a esperar que dios me deje tranquilo y haga cesar la lluvia, pero como eso es imposible sólo hace que el palo de agua se convierta en la tipica llovizna moja tonto. Contradiciendo mi destino y dispuesto a lo peor, salgo del starbucks con mi cafe y comienzo a caminar por el bulevar St. Michelle como si mas nada importara. Camino mojandome durante 30 minutos por los alrededores, paso cerca de la sorbona, veo las vitrinas de varias librerias universitarias y sigo esperando lo peor.
Recuerdo que osiris me espera en londres y no sabe que he perdido mi vuelo. Aunque me preocupo por el, siento una enorme felicidad de solo pensar que se echo el viaje al aeropuerto y yo no estaba. Osiris merece lo peor. Comienzo a buscar un Cyberg para poder escribirle mis aventuras y advertirle que en unas horas VOY CON TODO. 20 minutos despues consigo un ciberg algo primitivo cerca de la universidad y pido 15 minutos de conexion(1 euro). Le escribo a osiris y le explico brevemente lo que pasa y a que hora llegaría.
Salgo del ciberg y decido caminar a notre Dame. Estoy caminando al lado del sena y veo a lo lejos mi destino. Todo tal cual lo habia planeado. Aunque todavía llovizna, y mi cafe se ha acabado, me siento por un momento feliz de estar en esa ciudad.
Me acerco a notre Dame y comienzo a deleitarme ante su arquitectura y majestuosidad, veo turistas queriendo entrar y yo me alegro de solo estar parado frente a ella. Pero la felicidad es pasajera cuando perteneces a un grupo malaleche. Volvió el dolor de estomago, pero esta vez no era como el anterior, el dolor se triplicaba y las ansias de explotar estaban a la vuelta de la esquina. Comienzo a correr sin saber a donde ir, pase por varios cafes y restaurantes donde habian letreros que decian que los baños no se prestan, solo para clientes. Y yo seguía aguantandome el estomago como si fuese a desparramarse por el piso. La piernas comienzan a temblarme, el sudor en mi nuca, un frio indeseable comienza a apoderarse de todo mi cuerpo y yo en una esquina de la calle cual indigente agachado esperando lo peor.Casi me cago. Tomo fuerzas y sigo caminando ya con la tortuga saliendo del caparazon (que a decir verdad era una tortuga liquida), recuerdo el starbucks coffe y el cafe mocha blanc, y decido ir a explotar en el baño del causante de mis desgracias. Camino unos minutos y entro al starbucks corriendo, subo unas escaleras y veo el baño esperandome para unirnos en ese juego de placer que implica cagar. Me acerco al baño de caballeros y veo una especie de botonera con numeros y un letrero que dice: "El baño es solo para clientes, en su factura encontrará el código para utilizar el baño". En ese momento pienso en todo lo malo que he hecho en mi vida y me parece que no lo merezco. POR QUE? Bajo las escaleras corriendo para resolver el problema, hay una cola pequeña para comprar y me meto mientras pienso que comprar. Otro cafe ni de vaina, compro un Frapuccino de frambuesa (jugo frappe 4 euros).
El tipo me lo sirve y me dice:
-Bonjour.
Yo pienso Bonjour es el que te voy a dejar en el piso si no me das mi factura. Me desespero y le pregunto:
-Disculpe necesito utilizar el baño
Me dice de manera gentil:
-Los baños estan arriba puedes subir que estan abiertos.

Pienso en el malaleche de oro 2007 mientras subo corriendo y me voy quitando el pantalon antes de entrar. Me siento en la poceta y comienza a salir el mar de calamidades y odios que guardo en mi interior. Pasan 15 minutos y siento que ya no tengo nada que expulsar. Me limpio, reviso mi ropa interior y a mi alrededor como cerciorandome que todo está bien. Me subo los pantalones, me lavo las manos, me siento un hombre nuevo.
Salgo del baño con mi frapuccino y comienzo a beberlo. Una delicia. Bajo los escalones hacia la planta baja y siento que la gente me ve y se dicen: mira ese hombre como le brilla el rostro de felicidad.
Salgo del Starbucks y comienza a caer la lata de agua mas grande de europa. Sigo tomando mi frapuccino, no me preocupa mojarme y comienzo a caminar hacia la estación del tren para volver al aeropuerto. Mi vida es un asco. Tengo menos de 2 horas en paris y he gastado 25,50 euros sólo para echar una cagada. Resignado subo a mi tren, y sin importarme dejo paris y sus grandes maravillas.

7 comentarios:

Ozz dijo...

"POR QUE?"???
por lambucio obviamente...

Me encanta que lo 1ro que haces llegando a Paris es entrar en Starbucks...

Alejandro dijo...

Que agradable leer tu paseo escatologico por paris. Que amenos detalles sobre tu cagadita. Que lastima que no te manchaste el interiorcito.

Ache dijo...

estamos en agosto y yo ya creo que es imposible arrebatarte el malaleche de oro 2007. Ozz y MA obviamente han perdido capacidaes en su estadía en el primer mundo. solo emilio podría competir, pero creo que merece una mención distinta, porque su maleleche es provocada por el mismo, mucho Stark and Hotch cuando niño. ¿cómo se llamaría ese premio especial? se abre el foro: ¿qué opinan?

Ozz dijo...

El "MA de Oro"!
Recuerden que el comite temporal de investigacion determino que los Malaleche de Oro otorgados a Miguelangel no fueron causados por mala suerte sino idiotez

Legolas dijo...

Bueno... siempre puedes aplicar tu técnica de echarle la culpa a la comida del avión, y no asumir tu criollísimo error de meterte como desesperado a un starbucks. Ha podido ser peor... McDonalds en vez de starshit.

LOL!

Emilio dijo...

Lo mas chistoso del cuento es que el tipo , despues de la 1era cagalera, lo primero que se le ocurre es tomar cafe, para estimular las tripas aun mas.

Legolas dijo...

Aún más chistoso es que, después de la segunda cagalera, el tipo regresa a starbucks, a por un frapuccino de frambuesa, entra con su bebida al baño, hace sus cosas, y sale del baño, sonriente, con un vaso de frapuccino de frambuesa.

No sé si todo esto es por gula, ó es por lambucio como dice Ozz.

Por cierto, todos tenemos una idea intuitiva de lo que significa ser lambucio, pero por si acaso, busqué en el diccionario y conseguí esto:

lambucio, cia.

1. adj. coloq. Ven. Dicho de una persona: Que acostumbra comer entre comidas.

2. adj. Ven. Tacaño o avaro en las cosas pequeñas o en pequeñas cantidades. U. t. c. s.


Silla leiter.